Porque él bebe al estar en el agua se relaja y fortalece su musculatura y aprende a controlar su respiración.
Mejora su desarrollo motor a la vez que actúa sobre la conducta del bebe haciendo que no tenga miedo de explorar el nuevo medio y favoreciendo su socialización.
Se enfrentará a experiencias totalmente distintas, experimentará movimientos nuevos que en tierra no puede realizar. Por eso recomendamos a los padres una iniciación temprana.